Después de un día agotador en el trabajo, finalmente te has ido a casa, todo hambriento. Mientras buscaba algo sabroso para calmar su estómago rugiente, recordó que ayer guardó algunas quesadillas sobrantes en el refrigerador. ¿Qué sigue, preguntas? ¡Es hora de recalentar!
El caso es que algunas personas se sienten realmente intimidadas cuando se trata de calentar una quesadilla, ya que piensan que puede ser un desafío retener el sabor y la textura de la comida.
¡No se preocupe, voy a discutir algunos de los consejos y trucos más inteligentes para recalentar quesadillas para que pueda convertir ese alimento básico mexicano almacenado en una delicia caliente, crujiente, cremosa y abundante!
Antes de entrar en los métodos de recalentamiento, abordemos primero la forma correcta de almacenar las quesadillas sobrantes o cocidas en el refrigerador o el congelador.
Las quesadillas cocidas durarán hasta tres días en el refrigerador si se almacenan correctamente. Asegúrese de refrigerarlos dentro de las dos horas posteriores a la cocción por seguridad y calidad.
Solo asegúrate de dejarlos enfriar por completo antes de envolverlos individualmente con una envoltura de plástico. Una vez hecho esto, desliza tus quesadillas en el refrigerador.
Si desea prolongar su vida útil, lo mejor que puede hacer es guardarlos en el congelador. El proceso es sencillo. Envuelva cada quesadilla con una envoltura de plástico o colóquela en un recipiente hermético o en bolsas resistentes para congelar. Luego, etiquete la bolsa para rastrear la fecha, exprima la mayor cantidad de aire posible y asegúrese de que esté sellada adecuadamente.
Luego, mételos en el congelador. Cuando esté bien hecho, podrá disfrutar de sus quesadillas hasta por cuatro meses; aún así, es mejor consumir los sándwiches en dos meses.
Al recalentar una quesadilla, agregar un poco de aceite a la sartén puede evitar que la tortilla se queme. Sin embargo, las personas tienden a agregar demasiado, lo que puede ser la razón detrás de la humedad de la comida. Es recomendable no usar más de media cucharada de aceite por cada quesadilla.
Aparte de eso, debe evitar colocar su quesadilla en una bandeja para hornear si planea recalentar la comida en un horno. La grasa y la humedad del queso y la carne se absorberán en la tortilla, lo que hará que se empape.
En su lugar, recomendaría poner la quesadilla directamente en la rejilla del horno limpia y luego calentarla durante varios minutos. No olvide darle la vuelta para que pueda lograr esa agradable textura crujiente en ambos lados.
La textura crujiente de sus quesadillas depende del método de recalentamiento que esté utilizando y de la cantidad de aceite que haya incluido en caso de que las esté recalentando en una sartén. Para obtener mejores resultados, sugiero usar un horno o una estufa, ya que son los métodos más adecuados para recalentar quesadillas.
Para el método del horno, asegúrese de colocar la quesadilla directamente sobre la rejilla del horno limpia y evite usar una bandeja para hornear, ya que puede hacer que la comida se empape. Asegúrese de voltear la golosina para lograr una textura crujiente en ambos lados.
Sí, puedes recalentar una quesadilla siempre que las guardes de antemano. Como regla general, no debe dejar que los alimentos sobrantes se asienten toda la noche o durante más de dos horas a temperatura ambiente, ya que esto puede hacer que los alimentos se echen a perder.
Tenga en cuenta que hay algunas cosas a considerar cuando se trata de calentar quesadillas. Si los recalienta en una sartén, le sugiero que no use más de media cucharada de aceite o mantequilla para evitar que la comida se empape.
Por otro lado, coloque la quesadilla directamente sobre la rejilla del horno limpia en lugar de la bandeja para hornear.
Hay dos formas adecuadas de calentar sus quesadillas favoritas: en un horno y en una sartén. Puedes elegir lo que quieras, pero asegúrate de seguir los pasos para cada método, ¡así terminarás quesadillas calientes, crujientes y abundantes!
El proceso de calentar una quesadilla en una sartén es bastante simple. Es el mejor método para recalentar el sándwich, ya que le permite controlar el calor, lo que facilita la obtención de esa bondad crujiente para sus quesadillas.
Pero recuerde, puede llevar más tiempo calentar el interior del sándwich, dependiendo de su grosor.
A continuación, le indicamos cómo hacerlo:
Si ve que se oscurece rápidamente, ajuste el fuego a bajo. Para quesadillas más espesas, es recomendable cubrir la sartén con una tapa ya que este proceso puede recalentar la comida más rápido.
Recalentar las quesadillas en el horno lleva más tiempo en comparación con la sartén. Sin embargo, es uno de los métodos más seguros y rápidos que utilizan muchas personas.
A continuación, le indicamos cómo recalentar una quesadilla con un horno:
Para obtener mejores resultados, sugiero voltear la quesadilla de vez en cuando.
Aunque es posible recalentar quesadillas en el microondas, le desaconsejo utilizar este método, ya que podría arruinar su calidad o, lo que es peor, terminar con un desastre empapado y caliente. ¡Ay!
Para proteger el sabor y la calidad de sus quesadillas cocidas o sobrantes, ¡considere recalentarlas en un horno o en una sartén!